HabÃa una vez una cabra y sus cabritos. Cuando la
cabra se iba al bosque, los cabritos no le abrÃan la puerta a nadie. Cuando la
cabra volvÃa, cantaba con una voz suavecita y los cabritos le abrÃan.
Una vez, el zorro oyó cómo cantaba la cabra. Apenas se fue la madre, corrió a la casa e imitó con voz suavecita la misma canción. Los cabritos abrieron la puerta y el zorro se les comió a todos. Cuando la madre llegó a la casa, vio las huellas del zorro y supo que se habÃa comido a sus hijos.
La cabra buscó al zorro. Lo encontró en el bosque, cerca de un hueco profundo. La cabra le propuso al zorro:
--Vamos a ver quién de los dos salta al otro lado.
La cabra saltó y pasó por encima del hueco; pero el zorro se cayó al fondo. Con el golpe, se le reventó la barriga; los cabritos salieron de ella sanos y salvos. Después de eso, la cabra y sus cabritos siguieron viviendo felices.
Cuento “El lobo y los siete cabritosâ€
de los hermanos Grimm: Jacob Karl Grimm y Wilhelm Grimm; adaptado por
Trinidad Huillca Curse.