La presencia:
Estaba durmiendo cuando un pequeño ruido me despertó...al principio no sabÃa lo que era, pero me di cuenta que eran pasos que se acercaban a mi cama. No quise desvelarme del todo, ni siquiera abrir los ojos pues daba por echo que era mi padre o mi hermana que habÃan entrado un momento para a lo mejor coger algo de mi habitación.
Lo raro empezó cuando aquellos pasos no terminaban nunca...todo el rato los escuchaba y empezé a tener miedo...cuando tuve esta sensación los pasos empezaron a sentirse cada vez más cerca de mi cama y cada vez más cerca hasta que derrepente ya no se escucharon.
Yo dejé de respirar durante un buen rato, todabÃa seguÃa de espaldas a la puerta de mi habitación y ahora si que no me iba a darme la vuelta...no podÃa, estaba aterrado, no podÃa girarme, estaba agarrotado en esa postura.
TodabÃa no habÃa acabado la cosa...empezé a respirar muy hondo y me dà cuenta de que no podÃa respirar más despacÃo del pánico que sentÃa...saber que a mis espaldas habÃa algo y me aterraba. Por un momento no escuché nada, solo mi respiración...que no dejaba de ser profunda y fue entonces cuando escuché una segunda respiración, es decir, yo respiraba y cuando soltaba el aire escuchaba como alguien soltaba también el aire...ya no sabÃa si me estaba "emparanoiando", pero lo comprobé cuando dejé de respirar por un momento....DIOS MIO...aquella respiración la sentÃa, habÃa alguien a mis espaldas...esa extraña respiración la empezaba a sentir cada vez más cerca de mÃ, cada vez más cerca hasta que pude apreciar el aire en mi oÃdo....SUS LABIOS ESTABAN PEGADOS A MI OREJA...y un grito salió de mi boca que hizo girarme.
Estube un instante sentado, incorporado en la cama esperando a que mis padres se levantasen asustados por el grito que habÃa lanzado, pero nadie abrió mi puerta....nadi me habÃa escuchado...ERA IMPOSIBLE, jamás habÃa gritado con tanta fuerza.....toqué mi oreja y estaba casi congelada, me dolÃa del frÃo...fué la experiencia más aterradora que he tenido en mi vida...y ahora que la cuento no puedo evitar soltar una lagrima. AUTOR:Estaba durmiendo cuando un pequeño ruido me despertó...al principio no sabÃa lo que era, pero me di cuenta que eran pasos que se acercaban a mi cama. No quise desvelarme del todo, ni siquiera abrir los ojos pues daba por echo que era mi padre o mi hermana que habÃan entrado un momento para a lo mejor coger algo de mi habitación.
Lo raro empezó cuando aquellos pasos no terminaban nunca...todo el rato los escuchaba y empezé a tener miedo...cuando tuve esta sensación los pasos empezaron a sentirse cada vez más cerca de mi cama y cada vez más cerca hasta que derrepente ya no se escucharon.
Yo dejé de respirar durante un buen rato, todabÃa seguÃa de espaldas a la puerta de mi habitación y ahora si que no me iba a darme la vuelta...no podÃa, estaba aterrado, no podÃa girarme, estaba agarrotado en esa postura.
TodabÃa no habÃa acabado la cosa...empezé a respirar muy hondo y me dà cuenta de que no podÃa respirar más despacÃo del pánico que sentÃa...saber que a mis espaldas habÃa algo y me aterraba. Por un momento no escuché nada, solo mi respiración...que no dejaba de ser profunda y fue entonces cuando escuché una segunda respiración, es decir, yo respiraba y cuando soltaba el aire escuchaba como alguien soltaba también el aire...ya no sabÃa si me estaba "emparanoiando", pero lo comprobé cuando dejé de respirar por un momento....DIOS MIO...aquella respiración la sentÃa, habÃa alguien a mis espaldas...esa extraña respiración la empezaba a sentir cada vez más cerca de mÃ, cada vez más cerca hasta que pude apreciar el aire en mi oÃdo....SUS LABIOS ESTABAN PEGADOS A MI OREJA...y un grito salió de mi boca que hizo girarme.
Estube un instante sentado, incorporado en la cama esperando a que mis padres se levantasen asustados por el grito que habÃa lanzado, pero nadie abrió mi puerta....nadi me habÃa escuchado...ERA IMPOSIBLE, jamás habÃa gritado con tanta fuerza.....toqué mi oreja y estaba casi congelada, me dolÃa del frÃo...fué la experiencia más aterradora que he tenido en mi vida...y ahora que la cuento no puedo evitar soltar una lagrima. AUTOR:Estaba durmiendo cuando un pequeño ruido me despertó...al principio no sabÃa lo que era, pero me di cuenta que eran pasos que se acercaban a mi cama. No quise desvelarme del todo, ni siquiera abrir los ojos pues daba por echo que era mi padre o mi hermana que habÃan entrado un momento para a lo mejor coger algo de mi habitación.
Lo raro empezó cuando aquellos pasos no terminaban nunca...todo el rato los escuchaba y empezé a tener miedo...cuando tuve esta sensación los pasos empezaron a sentirse cada vez más cerca de mi cama y cada vez más cerca hasta que derrepente ya no se escucharon.
Yo dejé de respirar durante un buen rato, todabÃa seguÃa de espaldas a la puerta de mi habitación y ahora si que no me iba a darme la vuelta...no podÃa, estaba aterrado, no podÃa girarme, estaba agarrotado en esa postura.
TodabÃa no habÃa acabado la cosa...empezé a respirar muy hondo y me dà cuenta de que no podÃa respirar más despacÃo del pánico que sentÃa...saber que a mis espaldas habÃa algo y me aterraba. Por un momento no escuché nada, solo mi respiración...que no dejaba de ser profunda y fue entonces cuando escuché una segunda respiración, es decir, yo respiraba y cuando soltaba el aire escuchaba como alguien soltaba también el aire...ya no sabÃa si me estaba "emparanoiando", pero lo comprobé cuando dejé de respirar por un momento....DIOS MIO...aquella respiración la sentÃa, habÃa alguien a mis espaldas...esa extraña respiración la empezaba a sentir cada vez más cerca de mÃ, cada vez más cerca hasta que pude apreciar el aire en mi oÃdo....SUS LABIOS ESTABAN PEGADOS A MI OREJA...y un grito salió de mi boca que hizo girarme.
Estube un instante sentado, incorporado en la cama esperando a que mis padres se levantasen asustados por el grito que habÃa lanzado, pero nadie abrió mi puerta....nadi me habÃa escuchado...ERA IMPOSIBLE, jamás habÃa gritado con tanta fuerza.....toqué mi oreja y estaba casi congelada, me dolÃa del frÃo...fué la experiencia más aterradora que he tenido en mi vida...y ahora que la cuento no puedo evitar soltar una lagrima. AUTOR