El avaro tiene dos hijos, Cleante y Elisa. El joven Valerio se ha enamorado de Elisa y para vivir junto a la muchacha y facilitando asà su matrimonio, para el que veÃa mucha oposición, se le a ocurrido hacerse mayordomo de Harpagon. Cleante, partidario del enamorado, siempre en lucha con su padre que le tiene corto de dinero, se a enamorado de Mariana, una muchacha de buena familia, pero reducida a la pobreza, que desde hace poco tiempo habitaba con su madre en la vecindad.
Pero el viejo Harpagon querÃa casar a Elisa con el anciano Anselmo, persona de buena posición que aceptarÃa desposarla sin dote, y destina para el hijo (Cleante) una viuda rica; por su parte el mismo, a pesar de la edad no es insensible al amor, a puesto sus ojos en la ingenua gracia de Mariana, e intriga, valiéndose de la medianera Frosina, para obtener el consentimiento de la joven y de su madre.
Informados los hijos de tales proyectos, se desesperan: el seudo mayordomo Valerio, finge dar la razón a Harpagón, meditando en tanto alguna estratagema; al mismo tiempo Cleante ayudado por el hijo de Flecha, despejado y astuto lacayo, trata por todos los medios de procurarse una fuerte suma por todos los medios para hacerse independiente del padre.
Con este fin se dirige a Simón, alcahuete, quien le promete ponerle en relación con cierto usurero, pero cuando Cleante se haya a punto de convenir un empréstito que no puede ser mas oneroso, descubre que el usurero no es otro mas que su propio padre, mientras que Harpagon reconoce en el desventurado joven que se disponÃa a expoliar a su propio hijo. Puesto sobre aviso por el paradójico incidente, el avaro teme mas que nunca que le quieren engañar, y vive en perpetuo temor por cierta caja que contiene 10.000 escudos de oro, que a enterrado en el jardÃn.
Prosigue aun en sus proyectos matrimoniales; invita a Mariana y a su madre a una comida, mostrándose cómicamente embarazado con el deseo de ser esplendido y su invencible avaricia, iniciándose entonces justamente para el una serie de catástrofes.
En efecto, descubre que su hijo ama a Mariana y no tiene intención alguna de dejar a su padre campo libre, por que es correspondido por la muchacha; y se entera a continuación del robo de la preciosa caja (que Flecha a logrado encontrar y a sustraÃdo por amor al joven dueño), y en fin, entre fuera de si sospecha del mayordomo Valerio y lo acusa, el astuto criado le revela que ama a su hija y que se a unido a ella en mutua promesa de matrimonio, pues esta seguro de ser correspondido por la muchacha.
Harpagon, medio enloquecido, provoca la intervención de la justicia, acusa a todos y les amenaza con torturas y galeras. Pero llega de repente el señor Anselmo; en el intrincado barullo se descubre que este es el padre de Valerio y e Mariana, los cuales son por tanto hermanos y que la familia quedo separada y dispersa muchos años antes por extraordinarios reveses de fortuna que habÃan persuadido a los unos de la muerte de los otros…
Cleante se casara con Mariana, que se convierte en rica heredera; Elisa se casara con Valerio, y Harpagón, ya tranquilo por el hallazgo de la caja que le ha devuelto Flecha, termina por dar su consentimiento tanto mas cuando el rico Anselmo le promete correr con todos los gastos del noble matrimonio.