|
Erase un crudo dÃa de invierno. CaÃa la nieve, soplaba el viento y Belinda jugaba con unos enanitos en el bosque. De pronto se escucho un largo aullido. |
¿Que es eso? Pregunto la niña . |
|
Es el lobo hambriento. No debes salir porque te devorarÃa le explico el enano sabio. |
|
Al dÃa siguiente volvió a escucharse el aullido del lobo y Belinda , apenada, pensó que todos eran injustos con la fiera. En un descuido de los enanos, salio, de la casita y dejo sobre la nieve un cesto de comida. |
|
Al dÃa siguiente ceso de nevar y se calmo el viento. Salio la muchacha a dar un paseo y vio acercarse a un cordero blanco, precioso. |
|
¡Hola, hola! Dijo la niña. ¿Quieres venir conmigo? |
|
Entonces el cordero salto sobre Belinda y el lobo, oculto se lanzo sobre el, alcanzándole una dentellada. La astuta y maligna madrastra, perdió la piel del animal con que se habÃa disfrazado y escapo lanzando espantosos gritos de dolor y miedo. |
|
Solo entonces el lobo se volvió al monte y Belinda sintió su corazón estremecido, de gozo, mas que por haberse salvado, por haber ganado un amigo. |